DENUNCIA EN VALENCIA

Le prohibieron la entrada a un restaurante "porque manchaba" con su silla de ruedas

Se trata de un niño al que, tras visitar un restaurante en Valencia, España, se le prohibió el ingreso en su silla de ruedas.
miércoles, 28 de diciembre de 2016 · 13:31
La familia de Adrián, un chico valenciano que utiliza una silla de ruedas, denuncia que el pequeño no pudo entrar en un restaurante chino de la localidad de Algemesí (Valencia, España) porque sus responsables aseguraron que "ensuciaría el suelo”.
 
Ésto sucedió el pasado 18 de diciembre.

Tal como publica el diario local Levante, la familia publicó en Facebook su versión de los hechos: "(el dueño) Trató de impedir la entrada de Adrián con su silla al interior del restaurante porque decía que le ensuciaba el suelo con las ruedas del carrito especial que maneja tras sufrir daño cerebral, y pidió que dejara fuera lo que para él son sus piernas”.
 
"Fue un trato tan maleducado, insensible y discriminatorio que la impotencia hace que a día de hoy aún caigan de los ojos de la madre de Adrián lágrimas de dolor, dolor profundo de una madre que lucha con todas sus fuerzas cada segundo de sus días por el pequeño”, afirma el tío de Adrián y autor de la novedad que se hizo viral.
 
El mismo familiar revela que piensa acudir a los tribunales a denunciar los hechos "ante el organismo correspondiente” y a la vez manda ánimos a su sobrino "Adrián, tal restaurante no merece tu bonita sonrisa”.

Por su parte, el dueño del restaurante se defiende en el mismo medio y asegura que todo se debe a una confusión por el idioma por parte de su madre, que fue la persona que impidió la entrada a Adrián: "Mi madre no habla muy bien español, en aquel momento acababa de fregar y lo que quería era advertir a los niños de que el suelo estaba mojado y que tuvieran cuidado, fue una terrible confusión”, detalla.

Muchos usuarios de Facebook pidieron el boicot al restaurante, pero el mismo tío de Adrián solicitó a través de Facebook que no se lleve a cabo este tipo de acción: "No pretendemos que nadie deje de disfrutar de un restaurante chino [...], no queremos que se haga un boicot a un comercio donde de el dependen otras personas que no tuvieron nada que ver, máxime ahora en estas fiestas. Queremos humanidad, corazón y sobre todo equidad”.

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