Nadie se explica cómo se salvó el piloto
Terrorífico accidente en las 500 millas de Indianápolis
El auto de Scott Dixon impactó de lleno a 350 kilómetros por hora contra el de Jay Howard y levantó vuelo por decenas de metros, hasta estrellarse contra el muro de la calle de boxes. El piloto no tuvo un sólo rasguño y salió caminando. Mirá la secuencia y el video.
Uno de los accidentes más espectaculares y escalofriantes de los últimos tiempos se dio este domingo durante la 101° edición de las clásicas 500 millas de Indianápolis, sin que -milagrosamente- tuviera consecuencias físicas en los pilotos.
Aún no se cumplía la mitad de la competencia, cuando el auto número 77 del inglés Jay Howard se salió de la línea ideal de carrera e impactó contra el paredón externo, rompiendo la suspensión de su vehículo. Al no tener ya control sobre el volante, el vehículo se cruzó al medio de la pista, justo cuando pasaba por allí a toda velocidad el número 9 del neocelandés Scott Dixon, quien no hizo a tiempo de esquivarlo.
La escena que sigue enmudeció a todos. A más de 350 kilómetros por hora, Dixon pega brutalmente con la parte trasera del coche de Howard y su auto levanta vuelo sin control, desplazándose casi un centenar de metros por el aire, para terminar estrellándose de costado contra el muro interno de contención.
Literalmente, el auto se desintegró y, en un primer momento, todo el mundo temió lo peor. Sin embargo, gracias a las enormes medidas de seguridad implementadas por la categoría en los últimos años, la célula de supervivencia del cockpit resistió notablemente el impacto y el piloto salió caminando, sin el más mínimo rasguño.
"Pensé que Jay (Howard) se iba a mantener pegado a la pared después de su choque; entonces elegí moverme hacia abajo. Una vez que tomé la desición, ya no había vuelta atrás y no podía cambiar la trayectoria", contó Dixon -minutos más tarde- entrevistado por la cadena ESPN, bastante relajado. De que los milagros existen, de eso no cabe ninguna duda...
El momento del accidente
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