Innovando en tiempos de coronavirus
“Zombies atacando autos”: la nueva idea para una casa del terror en Japón
Buscando no tener que cerrar su casa embrujada, una empresa en Japón ideó una forma en la que se evita el contacto, se respeta el distanciamiento social y hasta se genera una experiencia aún más aterradora que la tradicional.En una escena que parece sacada de una película de apocalipsis se ve como zombies atacan a los vehículos de las personas, salpicando sangre y aterrando a sus pasajeros, pero todo esto como forma de entretenimiento de una ”casa del miedo” en Japón que busca poder ofrecer la terrorífica experiencia sin tener que romper los protocolos de distanciamiento social y así evitar el contagio de coronavirus.

La compañía encargada de su creación se llama “Kowafarasetai”, la cual se traduce a “Equipo de sustos” aproximadamente, lanzó una casa embrujada para automóviles, la cual permite asistir sin tener que bajarse del vehículo. La misma incluye “ataques zombie”, gente lanzando sangre falsa a los carros y hasta un servicio de limpieza para después del espectáculo.
Según uno de los creadores de la casa, llamado Daichi Ono, la misma se creó con el objetivo de poder continuar realizando el servicio sin tener que estar cerca de los clientes. “Esto terminó generando que nos acerquemos aún más”, explicó Ono, ya que ahora solo un vidrio los separa de los espectadores y permite tener contacto más crudo con las cosas, además de realizar una experiencia más aterradora en lo psicológico.
Por otra parte, mientras que en una casa embrujada tradicional las personas pueden escapar cuando se sienten muy asustadas, en esta experiencia uno está obligado a quedarse en el carro durante los 13 minutos, sin tener la posibilidad de salir del lugar a pesar de que el miedo los domine.
Este es uno de los lugares que se reinventó para evitar el contacto, debido a que el mismo es imposible en un contexto de pandemia como la generada por el coronavirus. Además, gracias a que están atrapados dentro de su auto, la gente puede gritar todo lo que quiera. Una vez que el terror termina, los zombies que atacaron al auto proceden a limpiar los desperdicios que quedaron en el mismo.