SE PUBLICÓ EN EL BOLETÍN OFICIAL
Es oficial: Nueva emisión de bono por hasta u$s 1.500 millones
El título que se lanzó hoy se llama Bonad 2017 y se emite por un valor nominal de u$s 500 millones a 18 meses de plazo.
El Tesoro sufrió los efectos de la suba de tasas de interés de plazos fijos que resolvió semanas atrás para los depósitos del Banco Central, en un esfuerzo por alentar las alternativas en pesos.
Por este motivo, muchos individuos aumentaron sus plazos fijos, entre otras inversiones.
La decisión encareció el fondeo de los bancos, redujo el atractivo de los títulos e hizo caer la demanda. Frente a esto, el Ministerio de Economía debió diseñar un nuevo instrumento "dollar linked".
El título, al estar atado al tipo de cambio en un contexto de búsqueda de coberturas, ofrece un premio sensiblemente más atractivo para los bancos que compensa los mayores costos de fondeo que sufrieron tras el ajuste de tasas de plazos fijos. En el mercado descuentan que la demanda superará ampliamente el monto ofertado y permitirá al Gobierno obtener mayor financiamiento que el anunciado.
El título que se lanzó hoy se llama Bonad 2017 y se emite por un valor nominal de u$s 500 millones a 18 meses de plazo. Los inversores lo suscribirán en pesos, al tipo de cambio oficial, y lo cobrarán al vencimiento con la cotización del dólar oficial que esté vigente.
Según se oficializó hoy en el Boletín Oficial, la emisión del "Bono de la Nación Argentina vinculado al Dólar 0,75% vencimiento 2017" (BONAD 2017) se amplía hasta u$s 1.500 millones. Así lo dispusieron las secretarías de Hacienda y de Finanzas mediante la resolución conjunta 203/2015 y 49/2015.
Hace quince días, el Gobierno debió abortar la última licitación del Bonac, el título que colocaba periódicamente a los bancos y que está atado a los rendimientos de las Lebac. El Ministerio de Economía había tanteado a las entidades, como suele hacerlo previo a cada operación, y encontró una escasa demanda en el sector. Sucedió que la suba de tasas de Alejandro Vanoli había aumentado fuertemente el costo de los bancos, reduciendo sus márgenes de ganancia y dejando menos incentivos para suscribir ese bono.
El Gobierno, a través de la Secretaría de Finanzas a cargo de Pablo López, debió mejorar el instrumento y atarlo a aquello que hoy atrae a empresas y público: el tipo de cambio oficial. Los ejecutivos creen que la próxima gestión, ya sin compromisos electorales a la vista, se verá empujada a convalidar una suba de esa variable.
