El Gobierno bajará a cero el arancel de importación de computadoras, tanto de PC’s como notebooks y sus componentes, desde enero. Así lo aseguraron fuentes calificadas del Ministerio de la Producción.
"La idea es poder bajar el precio al público de las computadoras, que está muy alto y resulta un factor de competitividad, ya que todas las empresas tienen costos importantes vinculados a la tecnología”, dijeron.
La decisión, que todavía no fue oficializada y comenzará a regir con el primer día hábil de 2017, representa en los hechos el fin de ensamblaje local de computadoras y notebooks. Aafectaría a unos 5.500 puestos de trabajo, según aseguraron fuentes del sector informático. Las ensambladoras de computadoras en la Argentina son unas 15, repartidas en su mayoría entre Capital Federal y el Gran Buenos Aires. Otras dos (BGH y New San) lo hacen en Tierra del Fuego.
Hoy la Argentina es notablemente más cara en los precios de sus productos infomáticos en comparación a países vecinos. El último fin de semana largo, unos 25.000 autos cruzaron la Cordillera con destino a Chile, en los denominados "tour de compras”. En el país vecino, las computadoras y teléfonos celulares se consiguen a precios cercanos a la mitad de las casas de electrodomésticos locales.
La decisión va a ser tomada de manera unilateral, en el marco de las excepciones que tanto Argentina como Brasil pueden adoptar dentro del Mercosur, sin necesidad de consultar a sus socios.
"Con esta medida, estimamos que el precio al público puede llegar a bajar un 12%”, dijeron las fuentes empresarias. "Por más que la baja del arancel sea del 35%, hay costos de comercialización y financiamiento que siguen incidiendo sobre el precio. Sólo el costo de comercialización y de financiamiento en una cadena de electrodomésticos representa un 50% adicional sobre el valor FOB de una computadora”, agregaron.