Dos monjas del convento de General Rodríguez declaran ante la Justicia sobre su relación con José López, el ex funcionario kirchnerista que fue detenido cuando intentaba esconder casi US$ 9 millones.
El juez federal Daniel Rafecas, que procesó al ex secretario de Obras Públicas por enriquecimiento ilícito, citó a declarar como testigos a las María y Marcela para media mañana en Comodoro Py y de hecho, pidió "blindar" el tercer piso de los tribunales para esos fines, "especialmente el sector frente a los ascensores y escaleras por las cuales se acceden a dicho sector".
El juez impartió "expresas directivas" al subcomisario Diego De la Fuente, encargado de la seguridad de los tribunales federales porteños, "en relación a la citación de las comúnmente conocidas hermanas María y Marcela con el fin de recepcionarles la declaración", según la agencia DyN.
Además, Rafecas dispuso una escolta para las monjas "desde el ingreso al predio hasta el ingreso a las instalaciones del juzgado procediendo de idéntica forma al salir del mismo".
Según lo sabido hasta el momento, Marcela ya dijo que ella estaba en el lugar cuando llegó López con los bolsos llenos de dólares y un arma semiautomática, que dejó en el piso, junto a la entrada de la casa situada dentro del convento.
Marcela se encontraba con Inés, la religiosa que se puede apreciar en el video revelado la semana pasada y que fue imputada como cómplice. Inés debe declarar ante Rafecas la semana próxima.
Ayer declaró como testigo Jesús Ojeda, el vecino del monasterio que llamó a la policía cuando vio a José López arrojar los bolsos. Dijo que tiempo atrás había "movimiento de autos importantes" en torno al convento Nuestra Señora del Rosario de Fátima y mucho movimiento, sobre todo los domingos.