Fue condenado a una cárcel de máxima seguridad
Cartero patagónico irá a prisión por no repartir 19 mil cartas
Se trata de Marcelino Gutiérrez, quien tenía su domicilio repleto de bolsas con correspondencia de varios años, que nunca entregó a sus destinatarios. Su paradero es incierto y tiene orden de captura por la Policía Federal.
Un empleado del Correo Argentino de la localidad chubutense de Puerto Madryn es intensamente buscado por la Policía Federal en todo el territorio nacional y, una vez capturado, deberá cumplir una condena de 1 (un) año de prisión en la Unidad Penitenciaria de máxima seguridad en Rawson, luego de que se encontrasen 19.302 cartas en su domicilio, que éste nunca entregó.
El insólito e intrigante episodio data de 2009, año en el cual el sujeto, identificado como Manuel Marcelino Gutiérrez, fue denunciado por su suegra, por supuestos maltratos y violencia familiar. En virtud de la denuncia, la Justicia ordenó un allanamiento en la morada del sospechoso, donde, contra todos los pronósticos, se encontró un escenario cuanto menos inquietante.
Tal es así que, una vez los efectivos irrumpieron en la vivienda, se encontraron con la friolera de 26 bolsas de consorcio atiborradas con correspondencia, desperdigadas por todo el inmueble. Las cartas databan -las más viejas- de 2 (dos) años de antigüedad, y algunas habían sido abiertas.
Tras años de juicios y alegatos, en 2015 Gutiérrez fue condenado a un año de prisión en suspenso, por el delito de “violar y ocultar correspondencia privada”. Sin embargo, el hombre fue citado a comparecer ante un Tribunal y nunca apareció, por lo que fue declarado en "rebeldía" y las autoridades diligenciaron su pedido de paradero y captura.
Lo más llamativo e incomprensible fue, en su momento, la respuesta de la defensa del acusado. El Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia había ordenado que las decenas de miles de cartas -que fueron secuestradas- fueran repartidas por el individuo; a lo que éste argumentó que, como "no le daba tiempo" para entregarlas a todas, las dejaba en su casa "para ordenarlas".
En ese sentido, el magistrado tomó la determinación de dejar efectiva la sentencia dictada en 2015, con la novedad que, una vez se concrete su aprehensión, Gutiérrez deberá cumplir su condena en la peligrosa U-6 del Penal de máxima seguridad de Rawson, tristemente célebre por la fuga de presos en 1972, que desencadenó en la masacre de Trelew.
