Ayer se negó a declarar pero hoy pidió dar su versión
Crimen de Monte Gallinero: la acusada dijo que "actuó en defensa propia y de su hijo"
La joven de 25 años acusada del homicidio de su entonces pareja en un departamento que ambos alquilaban en Ushuaia dio su versión de los hechos y reafirmó que actuó en defensa propia y la de su hijo que llevaba en su vientre, porque padecía violencia de género.La mujer acusada del crimen de su expareja en una habitación que alquilaban en 2021 en Ushuaia aseguró este viernes ante el tribunal oral que actuó en defensa propia y la de su hijo que llevaba en su vientre, y afirmó que padecía violencia de género.
Si bien el jueves se había negado a declarar, Gina Eliana Cárdenas (25) pidió este viernes por la tarde al tribunal de Juicio en lo Criminal de la capital de Tierra del Fuego poder dar su versión de los hechos en los que fue asesinado Alejandro Ramón Báez (26), por el que llegó a juicio acusada del delito de "homicidio agravado por el vínculo".
En 50 minutos, Cárdenas le contó a los jueces detalles del tipo que relación que mantenía con Báez y lo que sucedió la madrugada del 13 de noviembre del año pasado.
"No sé que pasó. Me agarró del cuello y me di cuenta que ya no le importaba ni su vida ni la mía ni la del bebé. Lo empecé a golpear. Me estaba defendiendo y defendía a mi bebé. No sabía lo que iba a pasar", dijo la mujer ante los jueces.
De esta forma, Cárdenas cambió la versión que había dado cuando declaró en la etapa de instrucción del caso, cuyo testimonio fue incorporado ayer por lectura, donde sostuvo que la víctima se había clavado en el tórax un cuchillo que ella sostenía, al subirse sobre su cuerpo cuando estaba acostada en la cama.
Este cambio fue notado por el fiscal Eduardo Urquiza, quien le preguntó específicamente sobre "la modificación en la mecánica del hecho".
La acusada explicó entonces desde detalles de su infancia conflictiva, con internación en hogares de menores, situaciones de violencia y consumo de alcohol y drogas, hasta la relación con Báez que se tornó problemática debido a sus celos y los episodios de agresión verbal y física que sufrió.
Gina Cárdenas posee una condena previa de cinco años de prisión por robo agravado y se encontraba en libertad condicional cuando se produjo el hecho por el que ahora es investigada, según especificó ella misma ante los magistrados.