PARA LAS PRIMERAS MEDIDAS ECONÓMICAS
Macri recibió el respaldo de los Gobernadores
El presidente Mauricio Macri recibió el respaldo de los gobernadores para sus primeras medidas tendientes a reactivar la economía, tras el estancamiento de los últimos años, con un consenso en la necesidad de atraer inversiones externas y mejorar la productividad de las provincias. En un almuerzo que compartió en la residencia de Olivos con los 23 gobernadores y el jefe de gobierno porteño, Macri puso en marcha su objetivo de relanzar la relación entre la Nación y las provincias.Si bien el encuentro se convocó también para comenzar a analizar los demorados cambios en la Ley de Coparticipación Federal, por la cual se reparten los fondos desde la Nación a las provincias, lo cierto es que el tema apenas sobrevoló durante el encuentro y hubo consenso en que una reforma de ese sistema requerirá mucho tiempo de debate.
"Queremos equilibrio en la distribución de los ingresos”, se limitó a indicar Macri en una conferencia de prensa tras el almuerzo, al ser consultado sobre la Coparticipación Federal.
"Hubo consenso en la necesidad de resolver los problemas de la macroeconomía y de mejorar la relación de la Argentina con el mundo. También hubo consenso en que hay que hacer crecer las economías regionales y coincidimos en que falta infraestructura en el país para lograr eso”, sostuvo al resumir lo abordado en la reunión.
Por su parte, el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, destacó que hubo "un apoyo político” de los gobernadores a "las medidas de gobierno” que piensa aplicar Macri en las próximas semanas, y, entre ellas, suena una eliminación de varias retenciones para el agro, que sería anunciada por el equipo económico la semana próxima.
"El presidente debe tener apoyo político de los gobernadores porque el país debe salir de la estanflación”, sostuvo, a su turno, el gobernador mendocino, Alfredo Cornejo, quien al ser consultado por la reforma de Coparticipación, sostuvo que "lleva tiempo y requiere de muchos acuerdos”, aunque destacó que se va a "encarar el desafío”.
Por su parte, su par de Salta, Juan Manuel Urtubey, también resaltó que cambiar cuestiones del reparto de fondos a las provincias "lleva tiempo discutirlo”, por lo cual "ponerle plazos no tiene sentido”, al tiempo que consideró que antes de eso hay que lograr que "crezca la actividad productiva del país”.
"¿De que me sirve que me den uno o dos puntitos más de coparticipación si no se genera mayor riqueza? Hay que trabajar en generar competitividad en los sectores productivos, en las economías regionales, lo cual no se logra solo con política monetaria y devaluación. Hay que mejorar el sistema energético para no tener que cortarle la luz a las fábricas y mejorar el transporte para que no sea más barato transportar granos de Rosario a Roterdam que de Salta a Rosario”, evaluó el salteño.
A su vez, Urtubey reveló que en la charla con el Presidente hubo consenso entre los gobernadores en que "la Argentina está fuera del mercado de capitales y debe retornar”.
Macri estuvo en el almuerzo junto a Frigerio, la vicepresidenta, Gabriela Michetti, el jefe de Gabinete, Marcos Peña y el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó.
En tanto asistieron todos los gobernadores: María Eugenia Vidal (Buenos Aires), Lucía Corpacci (Catamarca), Mario Das Neves (Chubut), Juan Schiaretti (Córdoba), Alicia Kirchner (Santa Cruz), Rosana Bertone (Tierra del Fuego), Claudia Ledesma Abdala de Zamora (Santiago del Estero), Domingo Peppo (Chaco), Miguel Lifschitz (Santa Fe), Alberto Rodríguez Saá (San Luis) y Juan Manuel Urtubey (Salta).
Estuvieron también Carlos Verna (La Pampa), Omar Gutiérrez (Neuquén), Alfredo Cornejo (Mendoza), Sergio Casas (La Rioja), Ricardo Colombi (Corrientes), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Gildo Insfrán (Formosa), Gerardo Morales (Jujuy), Hugo Passalacqua (Misiones), Alberto Weretilneck (Río Negro), Sergio Uñac (San Juan) y Juan Manzur (Tucumán), además del jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
La Coparticipación Federal es el sistema mediante el cual el Estado Federal y los Estados Provinciales dividen los ingresos obtenidos mediante la recaudación de impuestos directos o indirectos, determinados por el Congreso.
Según el artículo tercero de esta ley, el monto total recaudado por los gravámenes se distribuye en un 42,34% en forma automática a la Nación y el 54,66% en forma automática al conjunto de provincias adheridas, monto conocido como "transferencias automáticas”.
Pero a lo largo de los años, esta ley establecida en 1988 sufrió cambios y actualmente la Nación pasó a retener más del 70% y distribuye el 30% restante a las provincias.
Para compensar en cierta medida esa pérdida de los saldos coparticipables por parte de las provincias, se estableció un mecanismo mediante el cual se transfieren recursos desde el Tesoro Nacional hacia los ejecutivos provinciales.
Estos fondos, que sirven tanto para el pago de salarios de empleados públicos como para ejecución de obras públicas, se reparten "a discreción” del Gobierno nacional y constantemente se la tildó de ser utilizada con fines políticos, premiando a gobernadores "amigos” de la Casa Rosada y castigando a los "díscolos”.