CALIDAD DE VIDA Y PREVENCIÓN
9 de 10 casos de Cáncer de colon se pueden curar con la detección temprana
Se trata del segundo cáncer más frecuente en nuestro país y por día mueren 20 argentinos por esta enfermedad. Enterate cuáles son los síntomas.
El cáncer de colon y recto (colonrectal) es el segundo cáncer más frecuente en Argentina (11,8% del total de casos), luego del de mama (16,8%).
Según estadísticas del Ministerio de Salud de la Nación, fallecen en promedio 20 argentinos por día por esta causa, dando un valor anual de 7.313 casos. Sin embargo, el 90% de los casos de cáncer de colon pueden curarse, en la medida en que sean diagnosticados a tiempo.
En diálogo con El Liberal, el Dr. Ezequiel Espamer, especialista en Oncología y referente provincial del programa nacional de cáncer colonrectal del Instituto Nacional del Cáncer, comentó que "la tasa de mortalidad de este cáncer es alta" y que "afecta más a hombres, en algunas determinadas zonas de la Argentina, según datos del Ministerio de Salud de la Nación".
"La incidencia global es que en 100.000 habitantes 28 hombres son afectados en cáncer de colon y 19 son mujeres. Es una patología en la que la edad genera un riesgo, ya que la mayoría de los pacientes tiene más de 50 años. Pero puede haber casos antes relacionados con factores hereditarios", sostuvo el médico.
Al respecto, el Dr. Espamer explicó que "hay muchos mitos, pero dentro del cáncer, el de colon es prevenible, por eso hay que tomar medidas para hacer una prevención y detección temprana de la enfermedad".
"Si uno detecta esta enfermedad en una etapa temprana, es decir cuando los pacientes están presintomáticos, el cáncer de colon se cura hasta en un 90 % de los casos. Si lo detectamos en una etapa con síntomas, la curación puede ir de un 50 a un 60%. Si se tiene una lesión que puede dar cáncer, que son los pólipos, el 5% de éstos pueden desarrollar cáncer a lo largo de varios años. No todos producen cáncer, pero hay un tiempo para hacer los testeos de la población", dijo.
En cuanto al diagnóstico el especialista explicó que "se hace un test de sangre oculta en materia fecal, con un estudio bioquímico. Si es positivo hay que estudiarlo con una colonoscopia, una camarita que estudia todo el intestino". Mediante esta técnica se puede detectar pólipos, inflamación o el cáncer.
