CONTUNDENTE RESPUESTA
El vicedirector de la revista Caras justificó la polémica tapa: "Nosotros no somos calificadores, somos comunicadores"
Héctor Maugeri se pronunció sobre el tratamiento de la noticia sobre Amalia, la hija de la reina Máxima de Holanda, que avivó una vez más el debate sobre el cuerpo de la mujer.
La tapa de Caras del día de hoy está en el centro de la agenda mediática. La protagoniza Amalia, la hija mayor de la reina Máxima Zorreguieta, y heredera al trono de Holanda, que "(...) luce con orgullo su look 'plus size'". Así tituló el medio. De inmediato, la portada se volvió trending topic en Twitter y Caras recibió durísimas críticas sobre el tratamiento de la noticia.
Héctor Maugeri, vicedirector de la revista, subió un posteo a su cuenta de Instagram, que acumula más de 22,4 mil seguidores, con la tapa de Caras. "EXCLUSIVO. La revista aún no está en los kioscos y ya es TT en todas las plataformas digitales. La historia de Amalia, la hija de Máxima y heredera al trono, es una historia de superación y resiliencia", comenzó.
"La historia de Amalia, la hija de Máxima y heredera al trono, es una historia de superación y resiliencia".
"La adolescente, tras haber sido sometida a un bullying descarnado y brutal durante su infancia (algo que también sufrió Máxima y lo comentó en más de una oportunidad) logró superarlo junto al amor de su familia, y por sobre todo, creyendo en ella y en la mujer que quiere y elige ser", explicó.
"CARAS es una revista que siempre le dio 'voz' a los que alguna vez la sociedad intentó callar. Nosotros no somos calificadores. Somos comunicadores (...)".
Luego, justificó el tratamiento de la noticia y concluyó: "CARAS es una revista que siempre le dio 'voz' a los que alguna vez la sociedad intentó callar. Nosotros no somos calificadores. Somos comunicadores y en esta semana, la historia de Amalia es un ejemplo para otras niñas que pudieron -o atraviesan- la crueldad de los que sólo saben ver la oscuridad y no la luz @queen.maxima @maximaqueen".
Muchos usuarios de Twitter decidieron no continuar replicando la polémica tapa por entender que de esa manera le estaban dando visibilidad a la violencia simbólica que ejerce Caras como medio de comunicación, al reforzar las figuras hegemónicos y la presión sobre el cuerpo de las mujeres.
