JAPÓN
Aiko Chihira, el robot que juega ping pong
El dispositivo es preciso y realiza cálculos previos antes de jugar con un oponente de carne y hueso.El robot jugador de ping pong es intimidante: una máquina en forma de trípode, parecida a una manta religiosa, y capaz de jugar sin interrupción y sin fallar.
El robot "evalúa la trayectoria y la velocidad de la pelota al analizar el movimiento del jugador que tiene ante sí", y después de realizar cálculos "restituye la pelota a un determinado lugar que facilite su devolución" y la continuación del juego, explica su inventor, el grupo japonés Omron.
La idea no es comercializar este robot, sino "simbolizar la nueva relación hombre-máquina", agrega. Este aparato futurista tiene la misma función que esas sorprendentes ‘pom pom girls’ robóticas presentadas en el salón.
Es decir, demostrar las capacidades de la compañía creadora. Estas minicriaturas, que se mantienen en equilibrio sobre una pelota gracias a tres girosensores, fueron concebidas para exhibir la precisión de los componentes electrónicos de la sociedad que las imaginó, dijeron desde Murata Manufacturing.
Otro robot estuvo presente en la presentación: se trata de una joven de pelo largo castaño, que esboza una tímida sonrisa, realiza lentos movimientos con los brazos y parpadea, además de poder comunicarse mediante el lenguaje de los signos, aunque de manera muy somera.
Este prototipo de Toshiba se desarrollará sin duda hacia un robot más elaborado que podría ejercer en el futuro de ‘compañero para gente mayor’.