Dramático relato del ataque en Río Grande
"Mi mamá estaba debajo de los perros"
Luego de la noticia de un nuevo ataque de perros en la ciudad del norte de la isla, la hija de la víctima contó que su madre tiene el brazo comprometido y que va a necesitar cirugía. "El día de mañana matan a un chico y nosotros, ¿que hacemos?", lanzó.
La hija de la vecina de 69 años que fuera salvajemente atacada -este viernes- por un grupo de perros en el barrio Provincias Unidas, en Río Grande, amplió en los detalles del suceso, e informó que las heridas de su madre "son graves" y que va a requerir de cirugía.
"Las heridas son profundas; hay una parte del brazo que es la que está más comprometida. Ahora tiene que verla un cirujano; le van a tener que poner un injerto, porque la piel quedó negra, muerta", afirmó Adriana, quien se quejó por este medio, en virtud de la inacción del Municipio y la Dirección de Zoonosis.
"Me llamó la directora del hospital, y me dijo que, que hasta ahora, Zoonosis no había visto a ninguno de los perros que la atacaron. El lunes, mi mamá tenía ya que ponerse la antirrábica, no podían esperar a que el Municipio actúe, y arriesgar a que le pase algo por las mordeduras", explicó.
En relación al hecho puntual, Adriana contó que vive a 5 casas de su mamá y que el ataque ocurrió en el marco de una visita a su domicilio. "Estábamos con mi papá. Cuando ella se fue, él me avisa que había un montón de perros justo enfrente, como que se estaban peleando. Ahí me dice: "Tu mamá no se ve", narró.
Y continuó: "Papá salió para afuera, en ese momento me grita que la agarraron. Había unos vecinos al lado trabajando en un techo, advirtieron esto y la fueron a rescatar. Mi mamá estaba debajo de los perros", precisó Adriana.
En ese sentido, la vecina insistió en que los canes pertenecen al refugio que se encuentra a metros de su casa y que ésta no es la primera vez que se suceden los ataques, en virtud de que el portón de entrada queda permanentemente abierto. Y alertó del riesgo que esto implica, sobre todo para los infantes que juegan en el lugar.
"Tienen un portón de madera que no debe llegar a los dos metros de altura, antes viene un cerquito de reja. Los paseadores son jóvenes, suelen sacar a los perros sin bozal, asi nomás; no tienen experiencia", añadió.
Por último, la vecina indicó que se reunió con un grupo de 15 vecinos y que juntos intentarán llevar el problema ante las autoridades, para dar con una solución. "Vamos a hacer todo lo que haya que hacer. El día de mañana matan a un chico y ¿qué hacemos nosotros? Después, uno hace justicia por mano propia y ¿quien va preso? El vecino", remató.
