RÍO GRANDE
Municipio destacó “fallo ejemplar e histórico” en un caso de violencia de género
Desde la Administración comunal se apoyó y patrocinó legalmente a la víctima, de manera gratuita, a través de la Defensoría Municipal que accionó contra el agresor, Héctor Fernando Quipildor, quien fue condenado ??"este jueves- a la prensa de 10 años de prisión. Es el primer caso penal del que participa el mencionado organismo y ??oun claro ejemplo de la presencia del Estado municipal en materia de políticas de género???, señalaron desde el Ejecutivo de la ciudad.
La Municipalidad de Río Grande destacó el “fallo histórico y ejemplar” emitido por la Justicia fueguina en un caso de violencia de género en el que intervino la Defensoría Municipal, apoyando a la víctima de manera completamente gratuita.
La citada institución comunal, dependiente de la Secretaría de Promoción Social, “acompañó integralmente y patrocinó de manera gratuita a Irene Balti durante todo el proceso judicial contra su agresor”, señalaron desde el Gobierno de la ciudad, destacándose el hecho de que Héctor Fernando Quipildor fuera condenado a diez años de prisión, este jueves por la mañana.
“Es el primer caso penal de la Defensoría Municipal y un claro ejemplo de la presencia del Estado municipal en materia de políticas de género”, resaltaron las autoridades de la ciudad.
La secretaria de Promoción Social, Analía Cubino, expresó al respecto que “para nosotros es una jornada histórica, poder celebrar hoy que Irene Balti es libre”.
“Nuestras abogadas de la Defensoría ya venían trabajando en este caso de manera voluntaria desde el Colegio de Abogados, y en la generación de esta figura tan importante como es la Defensoría Municipal, pudimos acompañar este caso”, explicó la funcionaria.
“La condena es una gran victoria –añadió Cubino-, porque creemos que para muchas mujeres que viven esta situación, y que quizás nunca lo contaron, esto va a ser una forma de alentarlas a que se animen, porque hay justicia, porque eso permitió también que haya un camino de acompañamiento, de aprendizaje institucional y, a la vez, de la reparación para las mujeres de lo que significa haber vivido bajo la opresión, la violencia económica, la violencia física, la violencia psicológica para ella y para sus hijos”.
“Anhelamos que muchas mujeres se animen, porque vamos a estar para acompañarlas, también poder confiar en la justicia”, manifestó, y subrayó que “Gustavo Melella tomó esta enorme decisión política, de acompañar y patrocinar y seguir en la parte más difícil, trabajar con estas mujeres que no tienen la posibilidad de acceder a pagarse los servicios de patrocinio legal”.
