Tras el devastador incendio de noviembre

El Gobierno otorgó un subsidio de $3 millones para la fábrica de plásticos PIGSA

Los fondos están destinados para la compra de maquinaria. Es luego de la destrucción total de las instalaciones por las descomunales llamas que paralizaron directamente la producción, además de poner en jaque la continuidad laboral de los empleados.
miércoles, 15 de mayo de 2019 · 21:28

El Gobierno provincial, a través del Ministerio de Industria, otorgará a la empresa Plásticos Isla Grande SA (PIGSA) un subsidio de 3 (tres) millones de pesos, que deberán ser utilizados para la adquisición de maquinarias por la compañía.

 

En el marco de una nueva nueva medida para asistir a la fábrica tras el arrasador incendio que sufrió en noviembre de 2018, la decisión se plasmó desde el Ejecutivo con el objetivo de impulsar la pronta reactivación de la empresa, además de preservar los puestos de trabajo de sus empleados.

 

Inmediatamente después del infortunado siniestro, la gobernadora Rosana Bertone envió un proyecto a la Legislatura para eximir del pago de impuestos provinciales a PIGSA por el término de un año, el cual fue aprobado por los parlamentarios. Dicha ley estableció tasa cero para el pago de todos los impuestos, tasas o contribuciones, cuya recaudación se encuentre a cargo de reparticiones de la provincia de Tierra del Fuego.


Respecto del subsidio, la resolución (firmada por el ministro Ramiro Caballero) determina que la Dirección General de Industria realizará, con posterioridad a la concreción de la asistencia, “una inspección en la planta industrial del beneficiario", donde se constate la "efectiva instalación y puesta en marcha de la maquinaria adquirida", con los fondos otorgados.
 


Vale recordar que PIGSA está ubicada en la intersección de las calles Almirante Brown y Ortiz, en el Parque Industrial Río Grande. Allí, un incendio de descomunales proporciones se desató en noviembre último, que mantuvo al personal bomberil en tareas de extinción por varios días consecutivos, para evitar que las llamas se propagaran y alcanzasen a las viviendas lindantes.

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