El grupo ‘Archipiélagos del Sur’ cumplió 25 años de profusa actividad cultural

La celebración por los primeros 25 años del grupo ‘Archipiélagos del Sur’ la realizaron con una gran peña folklórica en el gimnasio San Juan Bosco de Ushuaia y luego con una fiesta en la sede de la calle Eva Perón al 50 del barrio San Vicente de Paul de la capital fueguina.

En este último evento también se realizó un agasajo a la joven bailarina Paola Cerdán quien cumplió 15 años de edad. Asistieron el cónsul General de Chile en Ushuaia, Luciano Parodi Gambetti, el presidente del Centro de Residentes Chilenos Ramón Gómez, la Madrina de la institución, Cristina Águila y asimismo autoridades del Partido Federal Fueguino encabezadas por la Apoderada Graciela Ledesma y el secretario de Prensa Ramón Taborda Strusiat, quienes acercaron los reconocimientos enviados por la presidente del PFF, doctora Liliana ‘Chispita’ Fadul.

"Nos sentimos muy unidos con Ushuaia”

El presidente y uno de los fundadores de ‘Archipiélagos del Sur’, Carlos Cárdenas, compartió que "es un tremendo esfuerzo y mucho sacrificio sostener a una institución como la nuestra; pero hay mucha voluntad y todas las dificultades se sortean poniendo el hombro y nada más”.

Agregó que "acá no tenemos entradas económicas de nada, nos sostenemos por la entrega y el espíritu de nuestra gente y lo que uno lleva por dentro, el sentimiento de sostener estas raíces lo que nos llevó hoy día a cumplir los 25 años de trayectoria”.

Carlos Cárdenas confió que "es un doble honor para mí, porque humildemente fui uno de los iniciadores de este grupo y hoy me encuentro como presidente del mismo. Comenzó con un hobby para mí cuando era joven y soltero, y hoy día son mis hijos los que llevan también el trabajo acompañándome, lo mismo que los demás integrantes”.

Por último señaló que "tenemos el orgullo de decir que nuestros hijos son argentinos. Nuestras raíces son chilenas y ellos son argentinos y a nosotros nos llena de orgullo que trabajen codo a codo con nosotros, sienten lo mismo y ponen el hombro por su patria argentina porque en definitiva somos un solo pueblo compuesta por dos naciones; tenemos sangre de ambos lados y eso es lo que nos une tanto y esto es un sentimiento sano y genuino”.

Cabe destacar que esta institución es apoyada por muchos en Ushuaia, no solo ‘Chispita’ Fadul, sino también el municipio capitalino, el gobierno provincial y muchas otras autoridades y personalidades del quehacer diario.

La cultura chilena es también argentina

La directora del ballet folklórico, María Isabel Cárdenas Andrade compartió que "estamos muy contentos de llegar a los 25 años, a las bodas de plata, con la misma fuerza de siempre, difundiendo la cultura, el canto y la danza, tratando de mantener los lazos con el lugar donde estamos radicados que es Argentina, específicamente Ushuaia”.

Agregó que "estamos contentos también de compartir con la comunidad en general, con nuestra gente compatriota, con la gente argentina y agradecidos por el apoyo que siempre nos dan”.

Admitió que "es muy difícil muchas veces sobrellevar estar lejos de la tierra natal a la que añoramos y también lo es que los pequeños de nuestra agrupación tengan contacto directo con las tradiciones de sus abuelos. Si bien algunos han venido desde Chile siendo muy pequeños, la mayoría son hijos y nietos de chilenos. Entonces es un doble mérito para nosotros como institución mantener viva la cultura chilena y este mérito es de los padres que integran nuestra asociación”.

"A nosotros todo este trabajo nos da más fuerzas e incentivos que transmitimos a nuestros niños y jóvenes para que sigan manteniendo la cultura y la danza. Además, a la gente le gusta muchísimo nuestra cultura, no solo a los chilenos, ya que la cueca y otras expresiones artísticas son muy valoradas universalmente e incluso cada vez que nos presentamos, asisten más argentinos que chilenos y eso es un doble compromiso para nosotros”, confió.

La directora del Ballet también reveló que "mantener a un grupo de bailarines, formarlos y mantenerlos en el tiempo y a la vez ir creando los nuevos semilleros, es un trabajo arduo que exige mucho esfuerzo y dedicación. Muchas veces cansados pensamos en que otros tomen el relevo, pero ver el entusiasmo de los chicos nos hace seguir en la senda diaria”.

Por último observó que ya hay nietos de los fundadores integrando el grupo de danzas. "Nuestro trabajo se mantiene en el tiempo y se proyecta al futuro por el amor que todos le ponemos”.