“THE REVENANT”
“Dormí entre cadáveres de animales”, contó DiCaprio del film rodado en Ushuaia
A pocos meses del estreno de la cinta “The Revenant”, dirigida por González Iñárritu, el actor habló sobre las dificultades que pasó durante el rodaje, entre ellas “como comer hígado de bisonte”. También dijo que estuvo al borde de la hipotermia y que durmió “entre cadáveres de animales”.
La entrevista la publica el portal mexicano "Informador.mx”, señalando que allí "Leonardo DiCaprio, quien a meses del estreno de dicho filme reveló las dificultades que pasó durante la filmación que corrió en locaciones de Canadá y en la ciudad de Ushuaia, Tierra del Fuego, en la Patagonia Argentina”.
"Puedo nombrar 30 o 40 secuencias que fueron algunas de las cosas más difíciles que he tenido que hacer. Ya sea entrar o salir de ríos congelados o dormir en cadáveres de animales, o lo que comí en el set. Soportar el frío y la posibilidad constantemente de una hipotermia”, detalló DiCaprio.
"De hecho, en el último tráiler estrenado se puede ver que DiCaprio es atacado por el frío y por un oso; sobre esta escena comentó que se necesitó muchísimo ensayo, además de cables, por lo que fue de lo más difícil que ha hecho en su carrera: "El resultado final va a ser una de las experiencias de mayor inmersión que la audiencia tendrá, como podría ser el estar cara a cara con un animal de esa magnitud que es increíblemente primitivo. La verdad es que sabía en lo que me estaba metiendo”, añadió en la entrevista.
Acerca de lo que Iñárritu lo hizo comer, detalló: "Ciertamente no como hígado de bisonte de manera regular. Cuando veas la película, verás mi reacción a eso, porque (González Iñárritu) lo mantuvo. Lo dice todo. Fue una reacción instintiva”.
Pese a las dificultades que enfrentó, DiCaprio está orgulloso con el resultado de la cinta, la cual tendrá su estreno en Estados Unidos el 24 de diciembre, mientras que a México llegará el 22 de enero de 2016 bajo el título de "El Renacido”. Aunado a Leonardo, el filme también cuenta con las actuaciones de Tom Hardy, Will Poulter, y Domhnall Gleeson.
Después se informa que "Cuando comenzó a rodarse la película se hablaba de un presupuesto de 60 millones de dólares; sin embargo, las estimaciones finales reportan un gasto de 135 millones de dólares. Lo anterior se debió al perfeccionismo obsesivo de Iñárritu, que lo llevó a ser un "megalómano”; así que aunado a la necesidad de repetir escenas, el director se aferró a filmar sólo con luz natural —en pos de un supuesto verismo—, lo cual hacía parar por horas a la producción. De hecho, por este motivo, parte del equipo técnico presentó su renuncia durante el rodaje”.
También se explica que "Otro factor que influyó en el presupuesto final, fue que la filmación iba tan lenta que tuvieron que mudar el rodaje de Canadá a la ciudad de Ushuaia, en la Patagonia, debido a que se terminó la nieve en la nación del maple y las escenas finales necesitaban ser filmadas en un ambiente invernal”.
