Hija de mujer condenada a perpetua en Ushuaia insiste que su mamá "no ahorcó" a Juvenal

"Es una pesadilla la que estamos viviendo, esto pasa una vez en un millón. Lo primero que se me pasó por la cabeza, porque la conozco, fue: esto no es así. Llevo 10 meses acá luchando por mi madre, ella no hizo nada de lo que la están acusando. Por la vida de mis tres hijos, sé que mi madre es inocente..."

Las palabras forman parte del dramático testimonio de Maclovia Díaz Soto (45), ciudadana oriunda de Chile e hija de María Mercedes Soto Maldonado (69), la mujer que -a fines de marzo último- fuera portada de todos los medios de la provincia, luego de haber sido condenada a prisión perpetua por el homicidio de su pareja José Juvenal Huenante Huenante (70), en el barrio San Vicente de Ushuaia.

Entrevistada esta mañana durante la emisión de "El Ángel de la Radio" por la FM 93.1, Díaz Soto se explayó largamente acerca de cómo era la vida en convivencia entre su mamá y a quien llama "Tío", quien fue encontrado sin vida el 4 de junio de 2018 en la vivienda de Aristóbulo del Valle al 500.

"Él (por Juvenal) era diabético y había tenído un Accidente Cerebrovascular (ACV), pero hacía muchas cosas solo. Yo lo cuidé 5 días, se despertaba en medio de la noche y volvía del baño en pasitos cortos. Mi mamá nos contaba que estaba mal para comer el Tío, a veces no quería bañarse. Tal vez ella no vio que el estaba en una depresión profunda", manifestó.

En este sentido, Maclovia aseguró que, 20 días antes de los trágicos acontecimientos, se le habían cambiado los medicamentos a Juvenal, y que se comunicaba diariamente con su mamá vía telefónica o whatsapp. Y contó detalles de lo que fue la última noche que pasaron juntos.

"Dormían en camas separadas por la edad. Ese día, ella me contó que estaban mirando los Martín Fierro tirados en el sofá cama, era el 3 de junio a la noche, domingo. Al día siguiente le mando un mensaje y me marcaba una rayita sola, entonces dije: 'bueno, capaz se le acabó internet en el celular'. El martes llega la noticia, de que el tío José murió y mamá estaba detenida", rememoró la mujer, con angustia.

Una separación de varios años 

En otro orden de cosas, Maclovia reveló un dato no menor y que hasta el momento no había trascendido, como es el hecho de que su madre y Huenante habían atravesado por una separación de 3 (tres) años, producto de un presunto problema que éste tenía con la bebida. Pero agregó que, finalmente, terminaron casándose el 10 de mayo, es decir, menos de un mes antes del fatal episodio.

"Llevaban 20 años de convivencia, tienen papeles desde 1996. Tenían una excelente relación, mi mamá lo quería mucho y era un hombre buenísimo. El bebía un poquito y estuvieron tres años separados; ella se fue a Punta Arenas y tuvo otra relación, pero el tío la fue a buscar. Desde 2012 retomaron la convivencia, él dejó de beber y ella lo cuidaba por la diabetes", añadió.

Así las cosas, prosiguió con la versión que le narró su madre, sobre lo ocurrido aquella fatídica noche de invierno. "Tío siempre se despertaba de madrugada, porque tenía el sueño medio raro. A las 4 AM lo encontró como otras noches sentado en su cama, y le dijo: "José acuéstate"; lo tapó y le tiró el papagayo que usaba para orinar. Ella se fue a acostar y se durmió, hasta la hora que se despertó con los gritos de la cuidadora cuando llegó. Eso es lo que mi mama vivió", afirmó.

Y siguió: "Fueron a la habitación, le decía "José, José", fueron a ver al pasillo y estaba el Tío tendido en el piso en el futón, con la soga al cuello. Empezaron a gritar, fue a la puerta a gritarle a los vecinos de enfrente, llegó la ambulancia y la policía. Dice que casi se tropieza con el cuerpo y le tocó la panza; estaba helada", aseveró la hija de Soto Maldonado.

Expuso que la discapacidad de su madre la exonera del supuesto crimen

Maclovia precisó que su madre se desempeñó por muchos años como vendedora ambulante. A raíz de esto, indicó que ésta sufre de una "discapacidad del 68,3% en sus brazos", y que esta información está "acreditada en un documento oficial de Argentina".

"Fue operada de un hombro y no puede cargar mucho peso. No podía abrir una botella de Coca-Cola o un frasco de mermelada, no puede levantar los brazos para hacerse un moño. NO TIENE FUERZA. En el juicio se comprobó que mi tío no murió estrangulado precisamente; después del ACV quedó con su lado izquierdo con poco movimiento. Pero se paraba, seguramente se cayó al suelo porque perdió el equilibrio y se rompió la base del cráneo, tal vez murió por eso y no por lo otro. Y a mi mama la condenan por estrangulamiento", cuestionó la hija.

Maclovia Díaz Soto declaró en el juicio contra su madre, sin embargo su testimonio fue desestimado por el Tribunal. No obstante esto, con la representación del Dr. Raúl Paderne insiste en que llegarán "hasta las últimas consecuencias", para lograr que se declare la nulidad del juicio y que su madre sea exonerada de los cargos. Actualmente, se encuentra privada de su libertad en la Alcaidía de Ushuaia.

"Tenemos que esperar hasta noviembre aproximadamente para el resultado de Casación; y ver si va a nulidad o si el Tribunal Superior revisa todo esto. A mi madre me la van a matar ahí adentro, tiene divertículos y varias enfermedades, toma medicamentos. Lo propio de una mujer de 69 años", concluyó angustiada la trasandina.