¿QUÉ OPINÁS?

Cómo detectar TOCS en los más chicos

El trastorno obsesivo compulsivo afecta al 2% de la población, aunque muchos ignoran que lo padecen. Cómo afecta la vida de los menores y cuáles son las terapias más efectivas.
lunes, 10 de octubre de 2016 · 19:35
El trastorno obsesivo compulsivo, conocido como "TOC" es una patología que afecta a muchas personas y se presenta generalmente desde la infancia y adolescencia.
 
Esta enfermedad psiquiátrica se caracteriza en su inicio por las obsesiones, que son instrucciones mentales –tales como pensamientos, ideas, impulsos o imágenes recurrentes y persistentes– que generan ansiedad y se imponen de forma repetitiva y no deseada, provocando un malestar importante.

Para contrarrestar las obsesiones aparece el otro rasgo distintivo: las compulsiones. Estas son acciones mentales y de conducta que se definen por comportamientos, entre los que se pueden mencionar lavarse las manos, ordenar, rezar, contar, repetir palabras en silencio, entre otras.
 
"Aquellos que los padecen experimentan un gran malestar debido a sus obsesiones e invierten mucho tiempo en los rituales de neutralización, lo cual puede llevar a una incapacidad funcional o total", explicó el psicólogo Fernando García.

El TOC es considerado el cuarto trastorno mental en orden de prevalencia, afectando a casi el 2 por ciento de la población general.
 
Con respecto a la edad de inicio hay una gran divisoria en dos grupos:en el inicio de la infancia y en la adolescencia. Además, hay una mayor incidencia en las mujeres que en los varones.

Para los chicos, las repercusiones del TOC tienen lugar en tres áreas importantes: en su carácter, en su socialización y en su rendimiento escolar. Los menores se muestran más retraídos, irritables, hostiles, tristes. Y son frecuentes las reacciones bruscas ante sucesos poco importantes.

"La demanda de tratamiento suele ser extendida y varía desde los 6 meses a los 18 años desde que comienzan los primeros síntomas. Esto es debido a que los pacientes tienen baja conciencia de su enfermedad y disimulan sus síntomas por vergonzantes aun ante familiares más cercanos", comentó el especialista.

A pesar del las constantes investigaciones, las causas son aún desconocidas. Los factores influyentes pueden ser lesiones en la cabeza, infecciones y funcionamiento anormal en ciertas zonas del cerebro. También podrían incrementar el riesgo de TOC los genes –precedentes familiares– y la existencia de antecedentes de abuso físico o sexual.

"La hiperactividad del lóbulo frontal, particularmente la zona orbitofrontal, podría dar como resultado algunos de los síntomas característicos del TOC, tales como la aparición de secuencias repetitivas observables dentro de los denominados rituales compulsivos, la rigidez cognitiva, el aumento de la preocupación y los sentimientos de culpa que acompañan las obsesiones", dijo García.
Más de

Comentarios