CONTUNDENTE PRONUNCIAMIENTO CONTRA EL ABORTO

Referentes nacionales evangélicos se expresaron a favor de las dos vidas

Pastores referentes evangélicos de las 24 provincias que integran el territorio nacional, se reunieron -el martes 5 de julio- en las instalaciones del auditorio de la iglesia Visión de Futuro, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y emitieron una declaración conjunta en contra del polémico proyecto de ley que ya tiene media sanción en el Congreso Nacional.
miércoles, 11 de julio de 2018 · 08:22

Referentes evangélicos de las 24 provincias del país se pronunciaron “en favor de las dos vidas” y rechazaron el proyecto de ley que plantea la legalización del aborto en la Argentina, tras una reunión mantenida -el pasado 5 de julio, en las instalaciones del auditorio de la Iglesia Visión de Futuro (Buenos Aires)-, ocasión en la que elaboraron una declaración por unanimidad respecto al tema.

Entre los argumentos esgrimidos por el mencionado sector se indicó que "el aborto es la consecuencia de una conducta irresponsable en el uso y práctica de la sexualidad que desprecia la vida del recién concebido y vulnera el primer derecho humano a respetar, el derecho a nacer."

En el documento rubricado por todos los integrantes del sector, se indica que “la práctica de abortos clandestinos, más allá de cuantos sean, es en sí misma un problema humanitario y de la sociedad actual, cuyas secuelas son profundas y difíciles de sobrellevar”, pero que “la salud pública debe encontrar propuestas que cuiden y protejan a la madre y el niño por nacer, defendiendo la vida de ambos."

"Nuestra posición sobre cuándo comienza la vida se apoya en fundamentos científicos, racionales y éticos, siendo el valor supremo de la vida, desde la concepción, hasta su muerte natural y que no puede haber Persona humana si no hay vida humana", subrayaron.

Además sostuvieron que “no es acertado apoyar una ley que conduce a la despenalización del aborto, dado que dicha posición iría en contra de la vida humana y de lo afirmado en nuestra Constitución Nacional, Tratados Internacionales y el Código Civil y Comercial".

"No hay vinculación alguna entre la profesión médica y el aborto, por lo tanto no puede enmascararse la práctica de aborto como un servicio de salud pública”, advirtieron, para observar luego que “no es propio de la medicina matar a personas inocentes e indefensas" (juramento hipocrático; pacto San José de Costa Rica).

En tal sentido consideraron que “el Estado y sus representantes legislativos deben tutelar el derecho a la vida, que es un derecho fundamental, y en consecuencia, está por encima de cualquier otro derecho".

Por otra parte exhortaron a la sociedad a “renunciar a la cruel frivolidad de ver al aborto como una solución rápida a  los problemas sociales, emocionales y egoístas” y a “abordar las causas desde la aplicación de políticas públicas para la no concreción del aborto, el acompañamiento a la mujer embarazada, la educación sexual y la mejora de la ley de adopción".

Además aconsejaron que "el Estado debe respetar la objeción de conciencia de los profesionales de la salud, y también de las personas jurídicas, aquellas instituciones que en su ideario incluyen en forma explícita el valor de las dos vidas".

"Vemos con gran preocupación y pesar que un tema tan complejo como lo es el aborto haya sido instalado en la agenda legislativa, cuando el mismo no ha sido parte de la plataforma electoral del actual gobierno y de otros sectores”, lamentaron desde las iglesias evangélicas del país.

Desde el sector se prefirió “trabajar en modificar las leyes que regulan la adopción, como así también en políticas sanitarias y educativas que promuevan la sana anticoncepción y la planificación familiar" y adelantaron que “las iglesias evangélicas no callaremos en la firme convicción de cuidar y  defender las dos vidas y que llevaremos en adelante en unidad todos los esfuerzos que estén a nuestro alcance para evitar que en nuestro país se legisle el derramamiento de sangre inocente”.

Además destacaron “el continuo y permanente trabajo de las iglesias evangélicas en todo el territorio argentino en la contención de la mujer  en crisis, en situaciones de violencia, abandono, pobreza y el acompañamiento de madres embarazadas en condición de vulnerabilidad."

"La justicia engrandece a la Nación, pero el pecado deshonra a todos los pueblos", alertaron, y dejaron el texto bíblico de Proverbios 14.34 para sostener su aseveración.

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