Ocurrió en Oviedo, España
Lo condenaron a un año de cárcel por acosar con 221 mensajes a su compañera de trabajo
El trágico hecho empezó en 2018 y ahora tuvo una resolución judicial para una empleada, acosada por los canales y medios digitales en la ciudad asturiana.
Una juez de la ciudad de Oviedo (Asturias, España) acaba de condenar a un hombre a un año de cárcel por un delito de coacciones por acoso por enviar 221 mensajes a una compañera de trabajo a través de WhatsApp, Instagram y SMS entre abril y julio de 2018 para que fuera su novia.
La titular del Juzgado de lo Penal 2 de Oviedo considera probado que el acusado incurrió en un delito de coacciones por acoso al remitir a su compañera:
- 127 mensajes de WhatsApp,
- 25 por Instagram,
- 69 por SMS y
- 17 llamadas por teléfono para insistir en encontrarse.
El acusado era empleado de una empresa donde la víctima comenzó a trabajar el 17 de marzo de 2018.
Qué dice la Fiscalía
Según el relato en la Fiscalía el acusado quería dar su ayuda para cuestiones vinculadas al trabajo para con su compañera, por lo que ambos mantuvieron una relación fluida hasta que el procesado empezó a insinuársele para mantener con ella una relación sentimental que la mujer rechazó en todo momento y hasta dejó de hablarle por este motivo.
La jueza siguió el criterio de la Fiscalía y confirma que el acusado le comunicaba a la vez lo mal que le caía imaginarse que pudiera "estar besándose con otro y le pedía una y otra vez que le hablara". Cuando la víctima bloqueaba al acusado, este optaba por comunicarse con ella usando otras redes.
La acusación mantuvo durante la vista oral que el acusado siempre quería el contacto físico con la víctima, a la que manoseaba la cabeza o el hombro y a veces la empujaba por los pasillos de la empresa donde trabajaban y luego se disculpaba alegando que había sido sin querer. La Fiscalía y el abogado de la acusación particular, Arturo Alonso, sostuvieron que habitualmente el acusado la esperaba a la salida del trabajo e insistía constantemente en llevarla en auto a su casa o la seguía, lo que hizo que la mujer cambiara su recorrido y recibiera asistencia médica por ansiedad, informa publica el medio EFE.
